Ingredientes

• Para la cubierta merengada:

200 g de azúcar Ledesma Clásica
1 clara
200 g de azúcar impalpable
70 cc de agua
C/N de jugo de 1/2 limón
4-5 cucharadas de agua

• Para la masa:

125 g manteca
100 g de azúcar impalpable
25 g de miel
ralladura de 1 naranja
Una pizca de canela
C/N de esencia de vainilla
1 huevo
250 g harina 0000
1 cda de cacao amargo
1⁄4 de cdita de polvo de hornear

• Para el relleno:

500 g de dulce de membrillo

Preparación

Para la masa, cremar manteca en cubos con azúcar impalpable, esencia de vainilla, canela, ralladura de naranja o limón, miel y sumar un huevo.

Seguir cremando y poner los ingredientes secos (harina, cacao y polvo de hornear) todos juntos pero tamizados. Incorporarls de a poco en la mezcla.

Cuando esté lista, colocar la masa entre 2 capas de papel film y estirar por encima formando un disco fino. Colocarla en una fuente y se va a frío por 1 hora al menos.

Retirar del frío, cortar discos con un cortante y llevar a horno precalentado a 170°C por 8-10 minutos.

En otro bowl batir la clara a punto de nieve y cuando empiece a espumar, incorporar de a poco azúcar impalpable.

Mientras, en una cacerola colocar el azúcar Ledesma Clásica junto con el agua y llevar a hervor hasta lograr un almíbar a 118°C.

Incorporar de a poco el almíbar en forma de hilo y batir hasta que quede homogeneo y frío.

Añadir jugo de limón y batir por 1 minuto más. Tapar bien el merengue para que no se seque por el contacto con el aire.

Para el relleno, pisar el dulce de membrillo o calentar unos minutos en microondas para que afloje.

Disponer el membrillo en una manga sin pico y rellenar sobre una de las tapas. Con cuidado de no romperla, colocar otra tapa encima, emparejar los bordes y repetir dos veces más.

Emparejar el membrillo para que no se mezcle con el merengue.

Cubrir de forma pareja con el merengue toda la torta y dejar orear 2 hs o hasta que el glaseado este seco.

¡A disfrutar de esta bomba y que viva la Patria!

TIP: Para hacer azúcar impalpable, licuar azúcar Ledesma Clásica en una procesadora o licuadora con fécula de maíz hasta obtener el azúcar impalpable… ¡Y listo!